Hey, protégeme, que me quemo

"Agobiada y solitaria sin solución a esta demencia, espero por el día en que socorras estas lagrimas."

Erase una vez un lugar feliz, lleno de gente pestilente, entre susurros sin sentido y murmullos egoístas, se alojaba una pobre alma incomprendida. La belleza es relativa y pasajera se repetía, mientras dibujaba algo de aspecto nauseabundo, un amigo lo invitaba a unas cervezas, pero él no acepto, tenía su mente ocupada en alucinaciones.

Fumo un cigarro junto al árbol más viejo de la plaza, mientras entonaba con voz espantosa el coro de una canción bizarra, tocó los bolsillos del pantalón y se asomaron pelusas, unos cuantos pesos y algún bicho raro muerto. Vacío por dentro, se dirigió al lago pateando una lata de coca-cola aplastada, contó un gato muerto, dos ratas y una que otra persona atontada. Una chica lo saludó: ¿Que tal todo?. El no respondió, solo se fijo en lo absurdo que era encontrarla de esa manera:Tan diferente, ya no era ella, nunca lo fue. Asintió unas cuantas veces para evadirla y continuo su trayecto, el viento no favorecía su visión,  así que se sentó en una esquina...ESTOY CANSADO. Se quejaba. El perfume de un río cercano lo obligo a ponerse en pie -MALDITA CONTAMINACIÓN-pensaba. Tras un día aburrido llegó a casa, se quito los zapatos, toco un poco la guitarra, se preparó algo ligero para comer, las hamburguesas y pizzas lo habían hastiado, así que se conformó con un poco de queso y jamón sacados del refrigerador. Alguien llamó a la puerta. 

Hola. Fue lo único que se escucho tras abrir aquel pedazo de metal, después su pecho se calentó de una forma espeluznante casi infernal, paso una de sus manos por encima del saco y sus ojos atemorizados contemplaban aquel líquido rojo carmesí., volvió a mirar en frente, ella tenía un revolver, que hermosa se veía sujetándolo. -¿Dos balas son suficientes no crees?- le preguntó. El dolor era intenso y aumentaba con cada débil palpitar, -Lamento mi mala puntería, aunque fue intencional,  creo que demorará un poco más de lo que esperaba, aunque sabes que en verdad me encanta verte aquí tirado a mis pies. Estaba perplejo, que absurda imagen se presentaba allí, que sucedía, -AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH- el dolor lo consumía.

Tranquilo- lo consolaba mientras secaba las lagrimas que le brotaban -¿QUE HACES, ESTÁS LOCA?

De amor, tal vez- respondió entre sollozos, su maquillaje rodaba de forma líquida por sus mejillas. Un perro aullaba en la otra calle así que lo ayudó a levantarse (en realidad lo arrastro) hasta el sofa.

Le puso una compresa de agua tibia, mientras buscaba fuerzas para explicar, tomó uno de los cigarros lo encendió y se lo llevo con manos temblorosas a la boca. En la radio sonaba una canción que ella se sabía de memoria, se acerco y le beso los labios mientras le decía: Te amo. Aún sin entender y odiándola  de gran manera, le respondió al llamado de aquel beso, no podía resistirlo, el dolor que sentía no se comparaba con lo que ella le provocaba, siempre tan impulsiva y controladora, perdida y encantadora. 

No pretendo sonar razonable, por que no soy alguien de razón- caminaba de un lado a otro- ¡Pero me enfermas! ¿Entiendes lo que te digo? no soporto la idea de que quieras dejarme, por favor prefiero verte muerto antes que en los brazos de otra, y tu no me dejaste otra opción.

¡ERES UNA MALNACIDA!-Le gritó, se estaba desangrando. -Calla por favor, que dentro de poco te acompañaré en tu padecimiento-.Tomó una de sus manos y la besó. Aún conservaba esa ternura y expresión de niña asustada que tanto lo conmovía. El otro día acostada en tu pecho me remordía al saber que no me pertenecías, tome la determinación de que eres toda mi vida y hoy te vas te acompaño en la caída. 

♫Like Romeo and Juliet
you two made a pact of death♪- sonaba la radio

Perdona mi locura, no se que me sucede, pero la luz de tus ojos se apagan y ya poco tiempo se me confiere, Gracias por amar mi triste historia y hacer parte de ella, ahora apretaré del gatillo y me volare la cabeza. ESPERA-grito,SI TUVISTE LOS COJONES PARA HERIRME DE MUERTE POR LO MENOS ACABA YA DE UNA VEZ CON ESTO, DISPARAME OTRA VEZ. Solo la cargué con tres balas y dos de ellas están en ti . No aguantaba y se echo a llorar encima de sus piernas. -Perdón, te amo...Perdón, te maté , te maté y ahora tu vida literalmente me pertenece. Soy feliz-ME PESAN LOS OJOS, ME PESA LA VIDA- Exclamo adolorido y llevo una de sus manos a esa cabellera abundante, sus dedos buscaron su rostro y ahí se posaron, TE AMO, TE ODIO. Pasaron tres horas y dos cadáveres fueron hallados en una residencia en el centro, una nota en la mano de la chica que se había volado los sesos tenía escrito: "Hasta que la muerte tuya nos separe"